La vida humana se desarrolla a través de etapas o ciclos. La naturaleza misma nos muestra, que nada es para siempre y que el cambio es parte de la evolución y crecimiento. Las estaciones del año, la etapa de siembra y cosecha, los diferentes momentos del ser humano desde que nace hasta que envejece. Cada etapa nos llena de experiencias con características y funciones propias.
¿Para qué es importante cerrar ciclos?
Saber identificar y cerrar ciclos nos permite iniciar uno nuevo con mayor conciencia del aprendizaje obtenido y mayor claridad para enfrentar y disfrutar los nuevos retos. Los bautizos, bodas, graduaciones, etc. son formas de representar el fin de un ciclo y el inicio de otro.
Me he preparado para todos los cambios…
No todos los cambios se presentan de la misma forma. Hay cambios que sabemos que llegarán y otros que se presentan de forma inesperada (como la muerte de un familiar, de un animal al que queremos, etc.) Algunos los resolvemos con nuestra creatividad y habilidades. Para otros podemos optar por el apoyo de un profesional.
¿Cómo cerrar un ciclo sanamente?
Date permiso de sentir
Cerrar un ciclo puede representar un duelo para las personas, pasar de la adolescencia a la adultez, dejar una relación, a tu familia de origen para formar tu propia familia o ir en busca de tus sueños, salir de un trabajo o de la universidad. ¿Te das cuenta de que el fin de los ciclos es inevitable? Por ello es importante que identifiques las inquietudes que esto genera y te des un tiempo para asimilarlo.
Valora tus ganancias
¿Recuerdas cuando aprendiste a leer y escribir? ¿Cuando lograste andar en patines o bicicleta? ¿Y qué tal aprender a manejar un automóvil? Cuando conociste a tu mejor amigo o amiga? ¿O la primera vez que alguien rompió tu corazòn? La vida está llena de aprendizajes por alcanzar y experiencias únicas e irrepetibles. Colectar tus logros, equivocaciones e integrarlos a tu experiencia como un aprendizaje va a facilitar sanar esa falta y permitirte estar listo para las nuevas experiencias.
Motívate con lo que sigue
Quizá puedas experimentar tristeza y alegría al mismo tiempo por lo que dejas atrás y lo que sigue en tu vida. Por ejemplo, al salir de casa probablemente extrañes a tu familia, los momentos que compartían, el acompañamiento que te brindaban o simplemente su presencia. Sin embargo, también experimentas motivación y alegría por lograr un crecimiento propio, experimentar tu libertad de forma distinta o los nuevos amigos que conocerás al llegar a un nuevo lugar.
Resistirte a los cambios no harà que desaparezcan.
“El cambio es la única cosa inmutable”, Arthur Schopenhauer.
Soy Psicoterapeuta con 11 años de experiencia en atención individual, en pareja y familiar. Egresada de licenciatura y Maestría (en Terapia Familiar) de la Universidad Nacional Autónoma de México. Donde también desarrollé aptitudes en investigación y evaluación psicológica. Considero a las personas como seres creativos que tienen la capacidad de resolver situaciones difíciles y aprender de ellas. Contribuir en ese proceso creativo por medio de la psicoterapia me nutre como profesional y como persona.
Me he desarrollado como Coach en ambientes empresarial y escolar. Además de contribuir en algunos centros de acompañamiento psicológico como psicoterapeuta y tallerista. Adicionalmente, he asistido a diplomados y cursos con formación terapéutica y colaboré con una asociación aportando mis conocimientos y habilidades dando apoyo psicológico, intervención en crisis, asesoría y canalización a personas víctimas de delitos como extorsión, robo, violencia doméstica o secuestro.