Las personas experimentamos cambios a lo largo de nuestra vida, sería iluso pensar que las parejas permanecen estáticas.
Uno de esos cambios es trascender de una relación de noviazgo a compartir un mismo espacio, donde se mezclan ambos estilos de vida.
En este artículo te platico de estas dos etapas:
La selección se refiere al momento en que hemos decidido compartir experiencias diversas con una persona. Esta etapa comprende el enamoramiento, existe atracción física, un match emocional, gusto por la compañía de esa persona y un deseo de seguir en contacto con ella.
Por medio de la convivencia en esta etapa nos permitimos conocer las características de la pareja: habilidades, ideas, costumbres, filosofía de vida, etc.
La convivencia con la pareja nos lleva a descubrir si nos gustaría proyectar a futuro la relación o no. Por ejemplo: si una persona te agrada mucho físicamente, pero no te inspira confianza o descubres que su proyecto de vida no coincide con el tuyo, probablemente no imagines una larga relación de pareja.
No es necesario que perciban todo de la misma forma; la buena comunicación, un proyecto de vida que pueda integrarse al tuyo, un trato respetuoso y el mutuo interés por sus inquietudes, deseos y necesidades pueden ser algunas señales que nos lleven a imaginar una relación duradera y sana.
Sin embargo, es muy común que en los procesos terapéuticos se abra la siguiente pregunta: ¿Es suficiente tener una buena relación con mi pareja para tomar la decisión de vivir juntos?
No existe una guía formal de pasos a cubrir para tomar la decisión, pero los siguientes puntos te pueden ayudar a evaluar si vivir con tu pareja es viable para ti:
No des nada por hecho
Vivir con una pareja puede tener diferente significado para cada persona. Antes de tomar esa decisión es importante que te des un tiempo para considerar si tu pareja comparte valores que son fundamentales para ti. Por ejemplo: fidelidad, amor, significado de familia, apoyo mutuo o cualquier otro valor que para ti sea relevante.
Gestión de problemas
No todo será color de rosa. ¡Hola cruda realidad! La naturaleza del ser humano es diversa y aprender a resolver de forma sana las situaciones difíciles es fundamental para que la transición sea la mejor experiencia para ambos. ¿Saben parar una discusión a tiempo? ¿Retoman los temas difíciles integrando una solución?
Respeto del proyecto de vida
Cuando vivimos en pareja no renunciamos a nuestros sueños, metas, deseos, necesidades, etc. Lo más sano es integrar ambos estilos de vida y generar un ambiente de libertad y respeto mutuo, evitando que con el tiempo llegue la frustración o el enojo. ¿Ambos realizan actividades que les gustan, aun viviendo juntos? ¿Tienes la libertad de frecuentar amigos o familares, incluso viviendo en pareja?
Para muchas personas es importante tomarse un tiempo para meditarlo. En Amarse bien: Transforma tu relación, encontrarás una alternativa para valorar y decidir.
Nadia Delgado Flores
Soy Psicoterapeuta con 11 años de experiencia en atención individual, en pareja y familiar. Egresada de licenciatura y Maestría (en Terapia Familiar) de la Universidad Nacional Autónoma de México. Donde también desarrollé aptitudes en investigación y evaluación psicológica. Considero a las personas como seres creativos que tienen la capacidad de resolver situaciones difíciles y aprender de ellas. Contribuir en ese proceso creativo por medio de la psicoterapia me nutre como profesional y como persona.
Me he desarrollado como Coach en ambientes empresarial y escolar. Además de contribuir en algunos centros de acompañamiento psicológico como psicoterapeuta y tallerista. Adicionalmente, he asistido a diplomados y cursos con formación terapéutica y colaboré con una asociación aportando mis conocimientos y habilidades dando apoyo psicológico, intervención en crisis, asesoría y canalización a personas víctimas de delitos como extorsión, robo, violencia doméstica o secuestro.